domingo, 2 de noviembre de 2008

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Tenemos tanta libertad para ver la misma cosa de tantas maneras que monton veces es tentador colgarse a sentirse miserable. Habemos habiles tramposos que con una velocidad inmedible logramos recolectar en segundos la mayor cantidad de autoflagelados puntos de vista que transforman al mundo frente a nuestros propios ojos en un lugar espantoso, negativo y a sus habitantes en las peores criaturas que podrian existir (incluyendonos y hasta regalandonos palizas extras, por giles, por creer que todo es por creer). Generamos una pelota gigante de feas sensaciones que se alimentan y crecen con el miedo y es todo una reverenda mierda, no sabemos para donde carajo arrancar. Yo ahora me quedo tranquila porque redescubri que a medida que vamos mandandonos a cagar, vamos viendo que podemos ser lo que queramos, que la verdad se siente hasta en el culo y si te haces el boludo no te deja dormir lindo.
Vos la sentiste, yo la senti yo te quiero, se que me queres, entiendo un poco mas mi tiempo, haremos tortilla de papas, te contagiaré todas mis pestes, tomamos café, me gusta el cafe con 3 de cafe y 2 de azucar en taza normal tirando a chica, para el cafe es mas rica la media luna dulce, ya comeremos tartas inventadas, ya no creo que el microondas ensucia la comida, a veces tomo leche, tenia dos canastas, no me estoy comiendo las uñas.

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